Ha sido una Romería un tanto especial, que al igual que la de Nuestra Virgen de la Cabeza, ha estado marcada por el mal tiempo, el frío y la lluvia y especial tambien, porque se ha celebrado dentro del Año Jubilar Mariano que el anterior Papa, Benedicto XVI, concedió a la advocacion de la Virgen del Rocío; Año Jubilar y Año de Traslado por lo que podemos titular como de "Historico Rocío".
Con la denotada presencia de muchisimas menos personas que en anteriores ediciones, comenzaba los actos del día Grande para Almonte y para toda Andalucía.
El tradicional Rosario de las Hermandades empezaría algo despues de la media noche, por lo que este se alargaría casi hasta las 3 de la mañana momento en el que todas las miradas ya se dirigían a la explanada de la Ermita esperando que el preciado Simpecaó de la Hermandad Matriz tomará la esquina de una abarrotada calle las Carretas donde los cientos de miles de rocieros estallarían en vivas y ovaciones que harían vibrar a toda la Marisma. Una vez el gran estandarte blanco cruzó la concha peregrina de su blanca fachada en manos de la familia del Hermano Mayor, en la Ermita, perfectamente delimitada por un cordón que realizaron los almonteños, se vivirian los instantes mas intensos. El "Salto de la Reja" se produjó a las 3:25 horas con un orden y exquisitez inusual en otras Romerías, la Virgen caminó sobre los hombros de Almonte por toda la nave central de una manera majestuosa pues el pasillo que el pueblo realizó, facilitó el trabajo de aquellos privilegiados que tienen la dicha de echar a volar a la Blanca Paloma de Almonte.
El repique de Lirio de las Marismas, San Jose, Salvador y Rocío, nombre de las 4 campanas de su espadaña, anunciaban que Ella ya paseaba bajo la luna en la fría madrugada de Doñana. La rapidez con la que el paso de plata llegó hasta el Real sorprendió a todos los rocieros pues en menos de una hora la Virgen ya habría visitado a las primeras 10 Filiales que saludarón a la Señora alzando sus Simpecaós y sus salves.
Todo hacía presagiar que este año sería diferente y así fue, la Procesión discurríría mucho mas ligera por la Aldea pero aún así se volvieron a repetir las estampas propias de cada Rocío como cuando la Patrona de Almonte llega a Triana, Hermandad que este año cumple 200 años, o su paso por la Casa de las Camaristas donde la oracion y la plegaria se presencia por unos minutos.
Huelva saludaría a la Virgen como es costumbre bajo petalos de rosa, pero en esta ocasion, no lo haría con las claras del alba, pues aún ni había amanecido cuando la Señora llegaba hasta esta Hermandad.
Alrededor de las 10:30 de la mañana llegó la Blanca Paloma de nuevo a su eterna casa blanca entre una muchedumbre que esperaba el momento de la despedida, una despedida con sabor dulce como el caramelo de sus mejillas, pues la Pastora volverá a procesionar por la Aldea en Agosto en la celebracion del Rocío Chico culminando así los actos del Año Jubilar.
El Hermano Mayor de Almonte destacaba la importancia que tiene el proteger a la imagen de la Virgen, una talla tan antigua y venerada, que en este año se ha visto sometida a tantas y tantas salidas extraordinarias y a todos los peligros que estas conllevan, es por eso que el "orden" y la "fluidez" con la que los almonteños han paseado a su Madre, debe convertirse en la tónica habitual de años venideros para evitar expòner a la imagen mas de lo que se debierá y para que no volviera a repetirse lo pasado en 2011 cuando el varal que se partió en la Procesión hizo que esta se interrumpiera urgentemente por miedo a que el techo de plata cayerá sobre Ella, por eso, afirmaba "todas las medidas son pocas"
A pesar de todo, una vez mas, Andalucía disfrutó de su otra Reina, la dueña de las Rocinas, aquella que vive en la marisma de plata entre arenas y caminos y ahora regresan sus Hermandades con la ilusion de volverla a ver muy pronto acompañada de ese gentío que tanto la quiere.
¡VIVA LA VIRGEN DEL ROCÍO!
¡VIVA LA REINA DE LAS MARISMAS!
¡VIVA EL PASTORCITO DIVINO!
¡VIVA LA PATRONA DE ALMONTE!
¡VIVA ALMONTE!
¡VIVA LA MADRE DE DIOS!
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