Hace unas semanas se presentaba el Cartel que representará este año nuestra Semana de Pasión; un cartel fresco, lleno de matices, luces y sombras.
El antiguo paso de Ntro. Padre Jesús de la Columna, en el que desde hace algunos años procesiona, Ntra. Sra. de los Dolores y San Juan Evangelista de la Hermandad de la Santa Vera Cruz, avanza por la Calle Ollerías, florecida de naranjos, entre las filas de nazarenos que forman el cortejo de esta destacada corporación del Domingo de Ramos iliturgitano.
En la instantánea obra del joven fotógrafo Jorge Rodriguez Toribio, se dejan entre ver no pocos detalles. La sobria "bacalá" de la Hermandad con su escudo corporativo abre el ultimo tramo de penitentes y tras del mismo, la excelente Cruz de Manguilla que conserva esta vieja Cofradía, flanqueada por dos ciriales guían el transitar de María compungida en la sacra conversación que Dn. Manuel Luque soñara entre las gubias y los nudos de la madera.
Un bello momento recogido por el objetivo de este perseverante joven cofrade, que quizás pierda algo de su sutileza a causa del cartel luminoso que desencaja el entorno tras la imagen de Ntra. Sra. de los Dolores.
A pesar de este detalle nos encontramos ante una estampa adecuada que recoge la esencia de esa noche silenciosa del Domingo de Ramos, la cual abraza a la ciudad desde el viejo Barrio de San Bartolomé,
Y todo queda en el Barrio...
Como viene siendo tradicional desde hace ya 6 años, la Callejuela de Azahares publica su propio Cartel para nuestra Cuaresma y Semana de Pasión.
En esta edición la bellísima imagen de Ntra. Sra. de la Amargura, de la Cofradía de los Estudiantes, obra del imaginero Víctor González en 1952 (quien también tallara anteriormente a este año la imagen de Santa María Magdalena para esta corporación), se nos presenta poderosa vestida de Reina magistralmente por D. Óscar Menéndez para los pasados Cultos de la Hermandad.
Ntra. Sra. de la Amargura es una dolorosa que ha ido adquiriendo con el paso de los años su actual presencia y carácter en las diferentes restauraciones a la que ha sido sometida. En 1997 fué intervenida por el escultor iliturgitano D. Manuel Lopéz y ya en 2007 la Hermandad confía las labores de restauración al imaginero Darío Fernández Parra, el cual proporciona a la imagen sus rasgos actuales. La dulzura de un dolor contenido, las lagrimas agotadas que ya apenas rebosan de sus ojos, la amargura en su mirada perdida, el quebranto y el sollozo presente en su mentón, el suspiro que parece escaparse de entre sus labios.
La Amargura andujareña es una de esas devociones que han ido perdiendo fuerza incomprensiblemente, ante el transcurso del tiempo y los vaivenes de su Cofradía, pero conforma en las noches de Viernes Santo la inconfundible figura de la gracia mariana, la elegancia y la exquisitez ante la dimensión que la dolorosa ampara a la luz de su candelería y bajo las bambalinas granates de su palio con ese propio sabor de Barrio noble andujareño que a gala ha llevado durante muchos años la Cofradía de los Estudiantes.
La Hermandad espera años de primaveras florecidas con la incorporación de nuevos y jóvenes cofrades que tienen la intención de luchar por ese resurgimiento que hoy parece estancado. Esperemos que así sea y vuelva la gloria que se escapa con ese ultimo suspiro del Señor de la Expiración, esperamos que vuelva la gloria en las manos de la Amargura andujareña, entre sedas y encajes de gracia, que vuelva la vieja gloria estudiantil con la luz de su mirada.
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| Cartel Callejuela de Azahares 2016 |
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