Semana Santa 2017

martes, 21 de octubre de 2014

"Nunca dejes de mirarnos"


La inocencia mas pura de una caricia, la ternura mas sobrecogedora que desata una sonrisa, el candor de dos miradas que se cruzan en un repentino instante, la firmeza de un amor dilatado e inquebrantable que emana por los poros de la piel y que va intensificandose con el paso del tiempo, un amor que nunca se adormece ante las adversidades. Es una bella historia que se va repitiendo y que se va consolidando en los  cuadernos de nuestro día a día, pues todos hemos crecido refugiandonos en su estampa serrana y nunca ha dejado de mirarnos.

Esta precioso momento fue fotografiado en la ultima "Peregrinación Blanca" que cada año la Real e Ilustre Cofradía Matriz de la Virgen de la Cabeza organiza a favor de todos aquellos que habitualmente no pueden acercarse hasta su Basilica de Sierra Morena para contemplar a la que es la Madre del pueblo de Andújar y de todos y cada uno de sus romeros. Fueron cientos y cientos de personas los que, en el señalado día del Pilar, llegarón hasta el Santuario para sentir a pocos milimetros de ellos la bendita imagen de la Morena. Ancianos, enfermos y niños a los que especialmente esta dedicada esta celebración pudieron besar su manto ante el Altar Mayor del templo y pedir la intercesión y el amparo de la Señora que durante mas de 3 horas recibió el cariño de la multitud que se agolpaba a las puertas del Santuario haciendo largas colas para poder siquiera rozarla unos segundos.

Es la inmensidad de la devoción que durante casi 8 siglos ha custodiado nuestra ciudad, una devoción que como la imagen muestra, se hace nuestra desde muy temprano quedando, quizas, para siempre perpetuada en nuestra memoria y en nuestros recuerdos esa primera vez que pudimos descubrir sus ojos verdes y que una vez que descubres jamas puedes olvidar. Es su mirada la de una Madre que ama y se entrega, una Madre que sufre con nosotros y nuestras culpas y perdona, una Madre que protege y que abraza, es la Madre que no nos abandona y que siempre nos acompaña, una Madre que no deja de mirarnos...






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