Callejuela de Azahares: Santo y Seña de Triana

Inmersos ya, en días carmelitanos, es ineludible acordanos de una firme devoción presente durante siglos en la capital hispalense, reflejada en las azules aguas de nuestro Río mayor, los 365 días del año. "Santo y Seña de Triana", Puerta de la misma Gloria, faro, luz y guía de los marineros; me quiero referir a la apodada como "el mechero" por su peculiar forma, a la Capillita de Nuestra Señora del Carmen de Triana. Situada en el arranque del Puente de Isabel II, en el costero izquierdo del mismo, segun entras al Barrio, sirve como sagrario de una pintura anonima del S.XVIII que representa a una Virgen sedente con el niño en brazos y con coronas, ambos, de plata en relieve, que ha estado intimamente ligada a la historia de este Arrabal sevillano.

En un principio este Cuadro, se encontraba en el antiguo Puente de Barcas, por entonces, unico punto de unión entre las dos orillas, pero con la construccion popular puente "el de Triana" la obra fue trasladada a la Capilla de Humeros en Sevilla, hasta que finalmente se le construyó una pequeña ermita en el lado del Barrio, pero esta no sería la definitiva, pues por motivos del ensanche del Puente en 1924 para así pudiera llegar el Tranvía, fue derrumbada y la pintura fue llevada a Santa Ana, allí se veneró hasta el año 1928 cuando por peticion popular finalizan las obras de la actual capillita.
Ladrillo rojo y ceramica trianera, conforman la silueta caracteristica en los atardeceres trianeros, cuando como una antorcha encendida, se eleva ante el tapiz dorado del cielo de Sevilla.
Con el paso de los años, la Capillita ha pasado a formar parte de la vida de los vecinos y cofrades de la ciudad que al pasar ante Ella, y como testigo de su fé, se presinan, para poder hallar el norte de sus corazones navegantes.

La Hermandad encargada de velar por la devocion inmemorial de la misma y mantenerla viva, posee en la Parroquia de la O, un altar donde se encuentra el Simpecaó que tantos años ha protagonizado los Rosarios en los que numeros fieles del barrio participaban.
Con la necesidad de procesionar una imagen propia, en su solemne festividad, pues el icono pictorico, titular de la misma, no puede hacerlo, la Hermandad encargará una imagen de vestir a Jesus Iglesias, que bendecida en el año 2003 sale en procesion por las Calles del Barrio desde la Parroquia de la O, a la que es trasladada dias antes y donde se le realizán los cultos. Se organiza tambien una preciosa procesion fluvial por las aguas del Guadalquivir, en barcaza, donde embarcaciones de todo tipo la siguen en su recorrido, con el momento de mayor emoción a su paso bajo el Puente, donde es aplaudida entre una lluvia de petalos, que flotan sobre el río.